domingo, 13 de septiembre de 2009

DE CUENTOS Y SUEÑOS

No les voy a contar ni un cuento ni una novela, aunque quizás lo parezca. Éste es el testimonio de mi vida cotidiana; y de lo que he aprendido hasta ahora. Tengo 17 años y me falta aprender mucho más. No los quiero aburrir, sólo trataré de invitarlos a abrir sus ojos a ésta, mi realidad.
Desde chico fui un típico soñador; soñaba con lugares felices, cuentos de hadas, príncipes, dragones, valientes caballeros, y algún otro personaje ficticio que daba imagen de héroe. Creía que el bien siempre vencía al mal; y que al final todos eran felices.
Pero no era más que una ilusión. En la realidad triunfa una señora muy oscura, llamada Injusticia, que en la mayoría de los cuentos infantiles no existe.
En mi realidad, el lobo se come a la abuela y a Caperucita; y el leñador lo mata y va preso.
El Valiente Caballero no puede con el dragón; y decide marcharse con el pensamiento de ser un perdedor de por vida.
La bruja se come a Hansel y Gretel; y su familia los está buscando porque no aparecen.
La Bella nunca se casa con la Bestia poque es fea; y la Bestia enfurece y se suicida al sentirse discriminado y muerto en sus sentimientos.
Popeye ya no come espinacas porque fuma marihuana para enfrentar sus problemas.
Superman jamás apareció tras permanecer encerrado en una cárcel de criptonita por querer opinar y rescatar a su país.
La Mujer Maravilla se deshizo del lazo de la verdad; ya no le sirve.
Aladín no saca más su lámpara por miedo a que se la roben.
El Lobo sopló tan fuerte que dejó a los tres chanchitos en la calle, sin alojamiento.
El Guasón tiene su propio programa de TV, junto con otros villanos que se encargan de corromper la educación utilizando unas frecuencias mágicas con tono hipnótico.
A Batman lo confunden; y trata de ahogar sus penas con el alcohol. Así, pasa las noches recordando cómo sus viejos fueron asesinados, con ganas de matar de bronca y rabia. Y Robin... bueno, sacó su lado femenino y se transformó en Rubí. Acompaña a Batman, pero no sé si con los mismos intereses.
Lo mismo que a la Bestia le pasó al Jorobado quien terminó suicidándose, y las campanas de Notre Dame no sonaron más.
A Peter Pan lo descubrieron como un violador que entraba a la pieza de los niños cuando dormían...
Ésta es mi realidad. Estoy solo. ¿Vos?

Luis

No hay comentarios:

Publicar un comentario